24 agosto, 2012

Solidaridad Europea: la gran mentira

La diplomacia, y por extensión la política, tiene entre sus particularidades la de decir lo que no es, y creérselo, y hacérselo creer a la opinión pública. Hay que hacerlo, eso sí, con la cara seria y en un ambiente solemne. Se convoca una cumbre y se sale de ella con cara de poker para enfrentarse a los micrófonos y hacer las pertinentes declaraciones, que serán las que hagan que los periódicos creen opinión y se difunda el sentido real o irreal de lo tratado.

Estos días, en Berlín, Alemania y Francia se reunieron para estudiar si se le daba a Grecia un respiro o se le exigía el cumplimiento estricto de sus obligaciones presupuestarias. Nada de respiros: el pueblo griego debe continuar con sus sacrificios para, por este buen camino, salir poco a poco de la crisis que lo atenaza... Y una mierda.

Grecia, lo mismo que España y, casi seguro Italia, aunque aquí tengo dudas porque Italia pesa demasiado, están resolviendo los problemas de financiación de Alemania. Los intereses exagerados de la deuda que tienen que pagar los países mediterráneos son aprovechados por los bancos alemanes, holandeses, franceses, etc. El pueblo de los países del sur, merced a la incompetencia de sus gobernantes durante un par de décadas, está pagando el estado de bienestar de los países del norte.

Europa no tiene nada de solidaria, es una entelequia el "uno para todos y todos para uno". Y no dejará de serlo hasta que no sea una Europa con política común, además de dinero común. El norte veía encantado como se despilfarraba en el sur, cómo los imbéciles en los gobiernos sacaban pecho (recuérdense los pavoneos de Berlousconi) y presumían de su economía (Aznar, Zapatero cacareaban orondos de sus logros)... El norte tenía la seguridad de que en no mucho tiempo iban a tener que pedir dinero de manera urgente y a cualquier precio, y ellos iban a estar esperando.

Los políticos de Alemania y compañía son tan culpables como los del sur de la crisis de la deuda. No estuvieron interesados en la política preventiva. Durante casi 20 años permitieron todos los excesos mediterráneos: prejubilaciones, subsidios, gasto público innecesario, administraciones repetitivas, subbvenciones sin sentido, política energética errática. Es decir, lo que se supone que no se debía hacer. ¿Por qué ahora se exige cumplimiento y no en los años de bonanza?

La respuesta es solo una. Si yo tengo mi dinero bien guardado y veo que mi vecino gasta más de lo que gana, es cuestión de tiempo que tenga que pedirme prestado. Entonces yo se lo dejaré a un interés jugoso. Él tendrá que poner a trabajar a sus hijos menores de edad y mendigará en la calle, pero yo solo tengo que mirar para otro lado para no sentir vergüenza mientras relleno mis depósitos a costa de su sangre.

Me pregunto que pasaría si el Mediterraneo en pleno se sale del Euro, forma una moneda común y no paga la deuda. Los sacrificios al menos estarían justificados porque no serían para engordar a los banqueros del norte, verdaderos especialistas a lo largo de la historia en tener agarrados por las partes a los países gobernados por demagogos despilfarradores.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Estoy en todo de acuerdo con Vd. menos en si salimos del euro los paises ribereños mediterráneos creando una moneda nueva y dejamos de pagar la deuda. Lo último es en lo que no estoy de acuerdo. Si no devolvemos lo que debemos daremos un paso para atrás de 100 años. Si además nos separamos del resto de los paises de eurozona: ¿a quién exportaremos? Porque USA se adherirá a ellos y tampoco podremos hacernos con el mercado norteamericano. De todo lo mucho y bien expresado por Vd. en este post con lo que me quedaría es con la moraleja. Si los paises norteños de la eurozona viven bien porque los sureños hicieron mal los deberes en estos últimos diez o quince años y ahora les pasa factura dejando que los mercados financieros especuladores sean los que no den el dinero para poder sobrevivir y no ellos, no permitiendo la ayuda desde el Banco Central Europeo comprando deuda soberana de los paises en apuros, si por un casual la eurozona se mantiene en el tiempo, ¿quién de los estados del sur puede olvidarse de los sacrificios realizados a causa de los vecinos sensatos y ricos del norte? ¿Alguien puede creerse que griegos y alemanes se sentirás hermanados en unos futuribles Estados Unidos de Europa? Yo me atrevería a más. Si pudiésemos devolver nuestra deuda, euro a euro, y fuésemos capaces de exportar a todo aquel que nos quisiera adquirir nuestros productos, por mí volveríamos a la peseta y lo que tendría muy claro es que CON ALEMANIA NUNCA MÁS. Eso que dijo hace tiempo un ministro alemán del gobierno Merkel de que "por fín Europa habla alemán" a mi no solo no me gustó nada sino que me recordó a tiempos pretéritos de los diferentes Reich. Alberto Sierra.