
Rajoy está en la gloria, sentado tranquilamente en la Moncloa sin hacer nada. Para Rajoy la culpa siempre es de los demás, en especial del PSOE. Sánchez, empecinado en no facilitar la investidura, pero no por una cuestión ideológica, que va; Sánchez no quiere hacerlo porque si la militancia detecta un giro a la derecha por su parte, puede que no le voten para la secretaría general en unos meses. Sánchez sabe perfectamente que en unas terceras elecciones el resultado sería calcado, pero prefiere que las haya a ceder, no le importe mientras el siga en su sitio en el partido. A Sánchez le importamos un huevo los españoles.
De Iglesias, que decir. Está callado como un muerto después de que le dieran detrás de las orejas por haber permitido unas segundas elecciones para intentar medrar. La broma le costó un millón de votos y no piensa meter la pata más. Ahora intenta culpar al PSOE de no ensayar un gobierno de progreso con unos números extraños en los que incluye a parte de la derecha nacionalista, algo que nadie entiende, él, que se negaba a hablar con Ciudadanos porque decía que era de derechas. Ahora sus militantes y simpatizantes tienen que hacer piruetas dialécticas porque se ríen de ellos cuando intentan justificar que no es lo mismo la derecha que CDC o PNV que Ciudadanos. Las risotadas se oyen a kilómetros.

Y de los nacionalistas, para qué perder tiempo, como Rajoy, a esperar, y cuando se requieran sus votos, a sacar tajada, como llevan haciendo desde que se empezó con este invento de «democracia» que dicen que tenemos. Y todo esto en pleno agosto. Nadie espere nada este mes, aunque el país se hunda. Ellos se van de vacaciones, faltaría más. Así que, lo dicho: turbios, amorales..., vagos.
2 comentarios:
Hasta los mismísimos
Tienes razón en quetodos merecen nuestro reproche,pero la cuestión es qué hacer. Yocreo que lo mejor sería que se fuera Rajoy y que Pp,PSOE y Ciudadanos pacten la investidura y una parte de un programa de gobierno que aborde el reto de secedionismo, algunos aspectos económicos y otros de políticas sociales.
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